Calzones olvidados, trofeos ajenos.

El arte de no encontrar el calzón.

Está oscuro y con la calentura del día anterior no sabes bien donde dejaste tus cosas.
Pantalones, sostenes, polera, zapatos y... calzón!
Ese momento donde encontrar el calzón es algo de vida o muerte! Donde tus instintos de mujer caliente, que no quiere escuchar un hombre que no quieres roncando toda la noche en tu oído, hace con que quieras salir de ese lugar lo más rápido posible.

(O simplemente te pasaste de copas y sientes una culpa interior por no recordar bien como se llama el sujeto que esta en pelota al lado tuyo, todo vale)

Porqué siempre es el calzón la prenda perdida? Podría ser el sostén, el cinturón, los aros... Pero NO, tiene que ser el calzón!

Estoy segura que las empresas fabricadoras de calzones implementan una tecnología burlesca que hace que el calzón se esconda justo cuando estas en situaciones embarazosas y lo necesitas más que todo en la vida.

Cuantas ya no han llegado con el calzón guardado en la cartera (porque si, si te rendiste a encontrarlos y te pusiste tus pantalones así a potopelao y encuentras tu prendida en un rincón de la pieza, mirándote y riéndose de tu cara de desesperación.)

Al olvidar un calzón en la casa de tu cachita nocturna, no solo es motivo de avergonzarse por, obviamente, saber que el sujeto se dará cuenta que te fuiste a potope y si lo peor, es que sabes que eso será un trofeo para este onvre! Que envolá ni se lo merece y la tenía tan chica que debiste salir corriendo inmediatamente de ese lugar para no sentir pena-verguenza-risa-arrepentimiento de lo que paso.

Entonces ese calzón olvidado, será el trofeo (y prueba) de este onvre. Una conquista nocturna que además de haberlo liberado interiormente le dejo un recuerdo, recuerdo este que le subirá el ego.
Los calzones olvidados son trofeos ajenos de las conquistas nocturnas.

Son un incomodo acontecimiento en la vida de las muheres (lean "mujeres" con tono colombiano) y una deliciosa sorpresa para los onvres calientes y egocéntricos.

Chiquillas lendas, siempre siempre evitar olvidar los colales, además de que algunos nos salen carozzi, algunos hombres no merecen que les inflemos tanto el ego ;)

Tip: Calzón de repuesto. La parte bueena ser una persona precavida (o en volá caliente) es siempre estar lista. Al menos con calzón de repuesto sabes que el hombre tendrá su trofeo (que no lo dejaste a propósito) y tu no te irás a potope para casa, lo que creo es mucho más humillante.


Gudbai

@ChicaSinFiltro